domingo, 31 de enero de 2010

Poetizame

Hoy me dirijo directamente a vosotros (amigos, lectores y seguidores) para dar una buena noticia (al menos para mí) y pediros un pequeño favor.
Poetizame ha escogido este blog como uno de los cuatro candidatos al blog de la semana y para resultar ganador debéis votar por www.sintemaniestructura.blogspot.com en www.poetizame.blogspot.com. Las votaciones las encontraréis al final de la página.
Desde aquí quiero agradecer a Poetizame la deferencia de presentarme como candidata, ese hecho ya es para mí un gran honor pues supone un pequeño reconocimiento a las horas de sueño que me hace perder la inspiración. Sé que con vuestra ayuda podría conseguirlo, por ello os animo a ayudarme y darme un pequeño empujoncito.
Gracias a todos de antemano. Un abrazo.

jueves, 28 de enero de 2010

Yo quiero un alma...

Yo quiero un alma desnuda
que no se esconda tras vestidos.
Un alma que no me escupa,
un alma que no haga ruido.

Yo quiero un alma radiante
que brille cuando haga frio.
Un alma que esté delante
cuando aparezca el olvido.

Yo quiero un alma cansada
que haga de mí su reposo.
Un alma que no crea en nada
tras haberlo creído todo.

Yo quiero un alma imposible
ante los ojos del mundo.
Un alma que sea imbatible,
que gane volando a Dumbo.

Yo quiero un alma serena
cuando pierda los estribos.
Un alma que sea gangrena
de un corazón malherido.

Yo quiero un alma distinta
a la que siempre he tenido.
Un alma que ya esté vieja,
¿es difícil conseguirlo?

lunes, 25 de enero de 2010

Fantasía

Entre el gentío que respira,
de la parte que me toca
a respirar por la boca,
están tus ojos que me miran.

Azules son, ¡quién lo diría!,
y en este océano de sombras
de marejada libre, flotan.
Cristales son, bajo la orilla,

rasguñando el talón de quien camina.
Sesgando las olas
de tus terribles sacudidas,
embistiéndolas, cual rocas,
están tus ojos que me miran.

Y al hacerlo alguien suspira
y reconozco su voz,
su soledad en tus pupilas...
y me pregunto: ¿soy yo
o todo es sueño y fantasía?

Tras esos ojos no estás tú...
está una parte de mi vida.

jueves, 21 de enero de 2010

Centellea

Centellea la ausencia de tu cuerpo,
vano absentismo
que me lleva a recordarte,
pues el mundo no es el mismo
desde que vives aparte.

Centellea el rastro de tus besos,
espectros visibles
en la esquina de las sombras,
mas hoy por hoy intangibles.
Eres hielo entre las rocas.

Centellea el tacto de tus dedos,
hilarantes desfilando
en derredor de mi boca,
deslizándose hasta el cuello,
apretándome cual soga.

Centellea el baile del desvelo
cubriendo en soledad
esta orfandad de mi cama,
sacudiéndome sin más
cual huracán a las ramas.

Centellean moteles en los pueblos
con sus luces de neón
en medio de la madrugada.
Se adivina, al interior,
la silueta de dos almas
(que antes éramos tú y yo).

lunes, 18 de enero de 2010

Letanía

Nada quito, nada pongo:
"Mis entrañas regurjitan tu cariño
y lo expulsan por los ojos.
Si de pesares, desdichas
se pudiera hacer negocio,
las ganancias obtenidas,
ten seguro, vida mía,
que enterraría entre los lodos.
Y de estas lágrimas caídas
que hoy emborronan mi rostro
haría páginas perdidas
en un libro de despojos
que relata la agonía
y lo que fue de nosotros".
Escribe esta letanía
y recítala en mi responso,
así es, tal cual fue dicha.
Nada quito, nada pongo.

jueves, 14 de enero de 2010

Rizos

Riza el aire los recuerdos
y los enreda en mi pecho.
No hay peine que desenrede
esta maraña de pelos
que, en mi corazón, presurosos,
pretenden rizarse al viento.
Hoy se guardan, recelosos,
el motivo de su celo.
Yo sé que no está en el aire,
tampoco en el pensamiento.
Y es que el mayor rizador
de recuerdos es el tiempo.


lunes, 11 de enero de 2010

Versos adolescentes

Versos adolescentes,
teñidos de aquel rojo carmesí
que inundaba los cuadernos
de tiernos e inocentes corazones
en la escuela de infantil.

Versos adolescentes,
bañados en ardientes esperanzas
que no entienden de pedales ni de frenos,
que no sufren del mal de la templanza
que va matando a sus viejos.

Versos adolescentes,
rimados sin libreta a media noche
en las camas más calientes
que, al despuntar el alba,
fingen ser tan obedientes.

Versos adolescentes,
acompañados de dulces serenatas
que apaciguan el mar de los deseos
en que nos vemos inmersos
en esta fría edad de plata.

Versos adolescentes,
considerados motivo de nostalgia
por los que, plañideros,
se refugian en mis versos
mientras curan sus mialgias.

sábado, 9 de enero de 2010

Jugarme la boca

Jugarme la boca, perder los dientes
por respirar una dulce recompensa:
tu voluntad de quererme.
Por arrancar los lamentos que no cesan
en mi estúpida cabeza.

Jugarme la vida, perder las sienes
por confirmar, cuando me besas,
que es verdadero lo que sientes
y no simples reflejos
de mis deseos más fervientes.

Jugarme la fama, perder las pieles
por hacer de ti la presa
que sucumbió ante mis redes,
sin reparar en las mesas
de pretéritos banquetes.

Jugarme las cartas, perder los reyes
por tenerte a mis expensas
sin que puedas defenderte,
por que me nombres tu reina
y reinemos para siempre.

Jugarme el bolsillo, perder la suerte
por contemplar la belleza
de tus ojos cuando peques
y que, en ese instante,
sean de mí únicamente.

jueves, 7 de enero de 2010

Desencanto

Quien quiso crecer y no pudo,
víctima de anhelos y encantos,
querrá convencer a unos cuantos:
el buen salmón se come crudo.

Mas, a fuerza de malos ratos,
quien presuma de inmaduro
comprenderá que, en el futuro
los baches son más que charcos
que se esquiven con un salto
aunque cueste superarlos.

Dile adiós al desacato:
no hay más patria que los muros.

Llora Peter, esto es duro:
la vida es un desencanto.

martes, 5 de enero de 2010

Anochece...

Anochece...silencio.
Sólo cuando anochece
en mi mente amanece el día.
La inspiración reverdece
en el prado "Melancolía".

Anochece...despacio.
Sólo cuando anochece
hago pie en un escenario.
El miedo desaparece
si te sueño a mi lado.

Anochece...cuidado.
Sólo cuando anochece
puedo arrancar los lazos
de este rostro que obedece
al pasar del calendario.

Anochece...velando.
Sólo cuando anochece
la ventana queda abierta
a un sueño que se adormece
si la esperanza se cierra.

Anochece...descanso.
Sólo cuando anochece,
en el fondo de mi vaso
un reflejo se oscurece:
el chispear de tu cigarro.