martes, 31 de mayo de 2011

Entre abril y mayo (Vol. II)

Se equivocó el destino cuando
aquel abril plomizo
inventó el amor en nuestros labios.
A veces tú, el cielo sobre ti,
bajo tus pies abismos, socavones
y a tu altura un espejo, el horizonte
que soñaron los hados en tu piel.
Y a veces yo, bajo el cielo, sobre
socavones y a mi altura
abismos dibujados
por los hados en tu piel, sin horizontes.