Una tregua iniciada por los cuerpos
tras la consecución de una hermosa batalla.
La resistencia se estrechó en un cerco
en el que, apenas, tu misil estalla.
Como en un susurro, el proyectil de tu bala
simula ostentar el azul de los mares,
recorriendo suavemente lugares,
que únicamente el corazón rescata
del murmullo olvidadizo de una noche
al que el recuerdo de mañana escapa.
Tímida y pesarosa se acerca el alba,
cubriendo de luz cualquier resquicio.
Nuestros caminos se alejan de tu aldaba,
poniendo fin a la guerra en armisticio.
Tal vez me equivoque. Pero creo que solo tú y yo sabemos de qué va ésto. Y te digo que, si es cierto, no hay nadie como tú para "describir" las cosas. Besos.
ResponderEliminarP.D. Espero que te lo estés pasanso bien.
P.P.D. Ah, más te vale llamarme, que dejamos algún asunto pendiente. :-D