Dentro de un tiempo...
el abrasivo sol de agosto se habrá marchado
hacia recónditos parajes de otro acento castellano.
Las copas de los árboles (los chopos, los nogales,
los plátanos) quedarán deshabitadas,
abrigadas por un fino manto de triste escarcha.
La ciudad tiritará angustiada
ante el aliento próximo del frío invierno.
Y yo me quedaré, observando en la ventana,
arropada entre mis versos.
Sonreiré en mi fuero interno.
Y triunfaré...
olvidándote en silencio.
Que alegría volver a poder leerte nuevamente tus bellas palabras.
ResponderEliminarEl verano pronto nos dirá adios con la manita..., aunque cada año le cuesta más trabajo irse.
Besos guapa!
Tiempo sin visitarte. estaba ausente de los blog, pero ya estoy retomando el cause de los mismos.. Todo un placer inmenso leerte..
ResponderEliminarHermoso poema..
Un abrazo
Saludos fraternos
muy bueno lauu!! =)senota la calidad
ResponderEliminarel otoño vendra acompañado por examenes... =) jajaj